Escuché a jóvenes de Yeshivot (Academias Rabínicas) entusiasmados bailando y cantando la última plegaria de Shimshón y no comprendí cómo es que están contentos con su caída. ¿Acaso no entienden la dimensión del fracaso?

Grande y mucha era la fuerza de Shimshón en cinco ámbitos:

En la corona de sus cabellos, hasta que fue rapado y su fuerza desapareció.

En su fuerza física y su valentía, hasta los portones de Gaza.

En las estrategias maravillosas que inventó, hasta los 300 zorros con el fuego ardiendo en sus rabos.

En los jugosos acertijos e historias del corazón, desde el león y la miel hasta la clavija y la máscara de tejido.

Y en el deseo por las mujeres que lo introdujo en el mundo de los pelishtim, le abrió las puertas de la venganza contra ellos, hasta Dalila quien finalmente lo derrotó.

¿Cómo Shimshón no comprendió que el deseo por las mujeres puede llegar a terminar con él?

Él estaba plenamente confiado en su fuerza. En tres ocasiones le contó a Dalila historias ficticias y el  filisteo que lo estaba emboscando se hallaba dentro de la habitación. En tres oportunidades, el acechador permaneció oculto y paralizado, porque vio a Shimshón burlándose de Dalila y de ellos. “Y lo acosaba hasta que su alma desfallecía“ (Versículo 16)-Dijeron Jazal, nuestros Sabios de Bendita Memoria en el Talmud (Tratado de Sotá 9b): “En el momento de máxima lujuria (en el momento culminante del deseo) ella se escabulló”. Y nuestros Sabios también expresaron allí en la Mishná: Shimshón se encaminó detrás de sus ojos, por consiguiente los filisteos le sacaron sus ojos”. El deseo sexual rapó la corona de sus cabellos y “Dios se había apartado de él” (Versículo 20)

Escuché a jóvenes (estudiantes de Academias Rabínicas) entusiasmados bailando y cantando la última plegaria de Shimshón (Versículo 28) para vengarse por uno de sus dos ojos, y no comprendí cómo es que ellos se alegraban por su caída, sólo porque en su muerte eliminó muchos más pelishtim que en su vida (Versículo 30). ¿Acaso ustedes no comprenden la dimensión del fracaso? ¿La enseñanza moral, entendida por Jazal, nuestros Sabios de Bendita Memoria, y Shimshón no comprendió? Que los veamos bailando y estudiando los conceptos de Jazal en la Mishná, y cuidándose del deseo sexual, que puede provocar también la caída de  los grandes en el mundo.

Nuestra venganza no es la “opción de Shimshón”, sino la independencia y la libertad y la construcción del Estado de Israel.

 Gentileza del sitio 929.