Una antigua profecía se hace realidad

Una antigua profecía se hace realidad

El profeta Ioná irrumpe en nuestro capítulo y proclama la concreción de una antigua profecía- la profecía de Moshé en el “Cantico de Haazinu”.

Edom es a Iehudá como Aram a Israel-una puerta de acceso al control del espacio y de las grandes rutas comerciales. Esto lo comprendieron y realizaron David y Shlomó (tanto en Edom como en Aram), Ajav y Yehoshafat, Amatziahu y Yehoash, Uziahu y Yarovam (y en nuestros tiempos, David Ben Gurión, con el control israelí del Néguev hasta Eilat).

No obstante, en un marcado contraste con Yehoshafat (su bisabuelo), Amatziahu intentó llegar a una hegemonía también sobre Israel, tal vez, como una conclusion del terrible precio de los actos de Ataliá en Ierushalaim.

Tras una cruel venganza contra Edom, al arrojar a decenas de miles de prisioneros “desde la cumbre de la peña” (Divrei Haiamim II, Crónicas II, capítulo 25, versículo 12) por sus delitos en Iehudá, Amatziahu convocó a una batalla decisiva contra Yoash, el rey de Israel, en Beit Shemesh. Su orgullo se hizo añicos y derivó en una hegemonía israelí en todo el ámbito, y por única vez en el período de la monarquía, un rey israelita de Shomrón rompió las murallas de Ierushalaim, y tomó prisioneros y rehenes (13-14) y aparentemente, controló también las rutas hacia Edom y Eilat*.

Amatziahu pagó un alto precio por sus andanzas, fue derrocado y huyó a Lajish, la capital de la Shfelá (la zona de tierras bajas) y Uziahu controló Ierushalaim mientras su padre estaba con vida. Uziahu cambió de rumbo, se reconcilió con Yarovam, el hijo de Yoash, y juntos convirtieron a Israel y a Iehudá en los gobernantes que controlaban toda la región “desde la entrada de Jamat hasta el mar de la Aravá” (versículo 25) y “hasta la entrada de Egipto” (Divrei Haiamim II, capítulo 26, versículos 6-15).

La profecía de la salida de la depresión hacia la cumbre de la victoria le fue transmitida a Yarovam por el continuador de la senda de Eliahu y Elishá, “el profeta Ioná hijo de Amitai”, de la tribu de Zevulún (Yehoshua, capítulo 19, versículo 13), que según Jazal, nuestros Sabios de Bendita Memoria era “el joven profeta” enviado a ungir a Yehú (capítulo 9, versículos 1-4, incluído el comentario de Rashi). La profecía de Ioná fue pronunciada en el lenguaje utilizado por Moshé en el Cántico de Haazinu- “pues no le quedaba cosa, ni preciosa ni vil” (Devarim, capítulo 32, versículo 36), y así fue interpretado en esa generación el Cántico de la Reprimenda, el sitio horroroso y la salvación del libro Devarim.

* El profesor Zeev Meshel encontró en Kuntillet Ajrud, en el noreste de Sinai documentos escritos en hebreo que mencionan a Shomrón.
Cortesía sitio 929

 

Volver al capítulo