Cuando la raíz está seca y se desintegra, ya no hay posibilidad de que crezcan frutos.  Se debe esperar el crecimiento de raíces nuevas, sanas, que produzcan frutos. 

Desde una óptica literaria del capitulo, se contempla una mezcla confusa de la parábola con la moraleja, de la realidad con la profecía. De este modo, los profetas provocan que el lector piense por sí mismo, para explicar y extraer conclusiones de sus profecías a qué se refiere Dios, precisamente, con sus apariciones.

En este capítulo de profecía calamitosa, se describen la sequedad y la sequía, y resulta difícil comprender si se trata de una moraleja alusiva a Efraim o si es la descripción de la calamidad que llegará a la Tierra de Israel.

En el capítulo son descriptos una serie de elementos:

a. El grano, la era, el lagar, el mosto-los frutos de la Tierra-no crecerán, y por ende, los hijos de Israel se verana forzados a comer lo impuro en el exilio.

b. El pueblo de Israel ya no se asemeja a las uvas del desierto ni a los higos de la primera cosecha-acá parece que se trata de una parábola muy clara.

c. La prostitución, como parábola del paganismo, afecta la caída de las lluvias que inciden en el fruto de la tierra. Se trata de una conocida parábola que  figura a lo largo del Tanaj, pero en esta ocasión, no hay esperanza alguna de que todo pueda cambiar-ya que la misma calamidad afecta la planta misma, afecta su raíz. 

El capítulo culmina con un exilio total, “los expulsaré de Mi casa… su raíz se ha secado, no volverán a dar fruto…  y vendrán a ser errantes entre las naciones”. Ya no hay armonía en el hogar. A raíz de ello, la casa de desintegra y la raíz está seca, de modo que ningún fruto habrá de florecer. Aquí parece haber una gran confusión entre la realidad profética y la parábola, acaso realmente el fruto simboliza los frutos de la Tierra de Israel, o tal vez, el fruto del vientre del pueblo, como se describe en el capítulo. ¿Acaso los bebés morirán? ¿Los frutos d la Tierra no crecerán? ¿O quizá la referencia al fruto alude a la espiritualidad?

Los dejaré con los interrogantes, pero a mi criterio se trata de una parábola sobre la raíz. La raíz de todos los tipos de parejas-entre Efraim y Dios y entre el pueblo y la tierra-y la raíz de la espiritualidad interior del pueblo. Todo se desmorona a partir de la raíz. El pueblo andará errante por el exilio, hasta que obtenga nuevas raíces espirituales de las cuales florecerán los frutos del vientre, los frutos de la tierra y los frutos de la fe, y tan solo entonces, retornará a su tierra.

Los referentes que escriben en esta sección, son miembros de la organización NAJAT-Jóvenes amantes del Tanaj, que representa el Centro de Estudios de Tanaj para los Jóvenes.