Los edificios del reino y los elementos del Templo

Los edificios del reino y los elementos del Templo

Division del capítulo:

Los edificios del reino: versículos 1-12
El traslado de Jiram desde Tzor: versículos 13-14
Realización de las columnas: versículos 15-22
El mar: versículos 23-26
La realización de las basas: versículos 27-37
La realización de las fuentes: versículos 38-39
Resumen de la elaboración de los elementos de cobre a cargo de Jiram: versículos 40-47
La elaboración de los elementos de oro por parte de Shlomó: versículos 48-50
Síntesis general: versículo 51

1. Versículos 1-12: Los edificios del reino

La relación  entre el número de años que le llevó a Shlomó construir su csa (13) y los años que le llevó construir el Beit Hamikdash, el Gran Templo (7), puede ser comprendida de dos maneras: el comentarista Rashi, según la Guemará en Sanhedrín 104b, lo interpreta como un elogio y señala que Shlomó se apresuró más en la construcción del Beit Hamikdash. No obstante, también puede interpretarse negativamente diciendo que Shlomó invirtió mayor tiempo en los edificios del reino. En efecto, debe tenerse en cuenta que se trata de un gran número de edificios y además la casa del bosque de Levanón, conforme a lo descrito en el versículo 2, que era más grande que el Beit Hamikdash (aún si no era tan bella y pomposa).
De los versículos se infiere que se trata de un número de edificios: 1. La casa del bosque del Levanón. 2. El pórtico de las columnas que aparentemente era el acceso a la casa del bosque de Levanón. 3. El portico del trono, que luego fue denominado el pórtico del juicio. 4. La casa de residencia de Shlomó. 5. El hogar de la hija de Paró

¿Dónde se encontraban esos edificios? El texto no alude al tema de manera explícita, pero a partir de otros sitios aprendemos que se hallaban en las adyacencias del Beit Hamikdash. Así se infiere a partir de la descripción en el libro Melajim II, capítulo 11, versículo 19, cuando trasladaron a Yoash de la Casa de Dios a la casa del rey, las que solo estaban separadas por la puerta de la guardia real. Así también se interpreta a partir de lo mencionado en el capítulo 26, versículo 10 del libro Irmiahu.

2. Versículos 13-14: El traslado de Jiram desde Tzor

En los versículos se menciona que su madre es una viuda de la tribu Naftalí y que reside en Tzor. Efectivamente, numerosas fuentes refieren a israelitas que viven en esta región, a pesar de que la misma se halla fuera del perímetro del asentamiento (ver capítulo 8, versículo 65; capítulo 17, versículo 9). A la luz de ello, es realmente posible que también su padre sea un israelita residente en Tzor (y de hecho, esa es la interpretación de Radak). Sin embargo, debe señalarse que en Divrei Haiamim II, Crónicas II, capítulo 2, se describe que Jiram, el rey de Tzor es el que envió a Jiram, lo que significa que era de su mismo pueblo.
El texto describe a Jiram con una clara similitud a la descripción bíblica de Betzalel (Shemot, capítulo 31, versículos 1-5). En referencia a ambos se dice que estaban colmados de sabiduría, comprensión y conocimiento. No obstante, a pesar de ello, hay también una diferencia saliente: en relación a Betzalel, Moshé le dice al pueblo que Dios lo ha colmado con espíritu de sabiduría y conocimiento. Y en referencia a Jiram se señala que “estaba lleno de sabiduría” y Dios no es mencionado. Puede que haya aquí alguna alusión crítica por el hecho de que Shlomó no lo involucre a Dios o a sus profetas en todo el proceso de construcción del Templo.

3.   Versículos 15-22: La realización de las columnas

Presten atención que aquí en los versículos, hay al comienzo una descripción de la propia columna y luego una descripción del capitel, mientras que la descripción de las decoraciones se refiere principalmente al capitel. En lo concerniente al significado del nombre de las columnas citado en el versículo 21, vean el comentario de Radak.

4. Versículos 23-26: El mar

En Divrei Haiamim II, Crónicas II, capítulo 4, dice explícitamente que la finalidad del mar es para el lavado de los  Cohanim, Sacerdotes.
Versículo 26-“Dos mil bathes cabían en él”, la medida de “Bath”  es similar a la medida de la “eifá” (ver en Yejezkel, capítulo 45, versículo 11) y aquí se hace referencia a unos sesenta mil litros.

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